sábado, 19 de diciembre de 2015

Ni san, ni sa, ni brisa ya corren mi nube de algodón,
ni los, ni nos, ni vos, ni yo debemos cargar esta cruz.
Comprender, aceptar..
Hicimos nuestro camino al caminar, 
y hoy decidimos frenar acá,
no vamos al mismo lugar.
Traté de hacer a mi bien tu bien
y ves bien que me salió mal,
no acostumbro a fracasar.
Dijiste: "hasta acá, ya fue, me voy, mi vida no está junto a vos.
Ya me cansé que te de igual si soy feliz o no lo soy."
Comprender, aceptar..
Parecía tan fácil como sumar
tu amor y mi lealtad,
mi ternura y tu amistad.
A veces Martes y Venus se llevan mal,
no es cuestión de maldad,
es duro aprender a amar.
Y acá estoy despidiéndome,
mascando tu rencor, lo sé.

No me quedó más que aceptar,
soy tan culpable como vos.
Yo también dejé de regar
la flor de la superación.
Comprender, aceptar..
Prometiste cuidarme sin importar,
y hoy ya no importa mi bien estar,
lo importante es tu ansiedad.
Regio mi vida al azar una vez, ¿sabes?.
No me gusta apostar,
siempre me tocó pagar.

Yo me propuse a superar 
tu ausencia a pesar del dolor,
vos preferís no analizar, 
seguís en busca del amor.
Comprender, aceptar..
Por más gotas de sal que le robe al mar,
por más flores que un rosal,
hoy nos toca despegar.
Por más gritos de paz,
por más soledad que hoy castigue mi voluntad,
por los dos ya no da más.

Y acá estoy despidiéndome,
marcando tu rencor, lo sé.
Estoy confiando que el tiempo nos dirá que hacer.

Y acá estoy despidiéndome,
mascando tu rencor, lo sé.
Estoy confiando que el tiempo nos dirá que así estuvo bien.
Las palabras que custodian al miedo ya se van a callar,
en los libros que nunca leí tal vez te deba buscar.
Y tu voz, mi amor, todavía a veces suena como un río sin fe,
y en la multitud un alud de alcohol me dejaría sin ley.
Y, por favor, escuchame si queres esta vez porque necesito verte bien
y sin tus manos voy cayendo sin red en esta cuerda de humo..
Ni un momento, ni la eternidad, esto va más allá
con vos mi alma se volvió a iluminar,
si no fuera porque vos estás, yo no estaría acá.
Desde tus ojos se ve mucho más.
Los afiches a la barra siniestra ya no le sirven más,
y los testigos, falsos de la injusticia, ya la van a pagar.
Pero tu voz todavía a veces suena como un río sin fe,
y en la multitud un alud de alcohol me dejaría sin ley.
Y, por favor, escuchame si queres esta vez porque necesito verte bien,
y sin tus manos voy cayendo sin red, el manco se queda mudo.
Ni un momento, ni la eternidad, esto va más allá,
con vos mi alma se volvió a iluminar,
si no fuera porque vos estás, yo no estaría acá,
Misterio, tiempo, verdad..
Desde tus ojos se ve mucho más.